Antonia, es un componente muy importante de la Peña activa más antigua de la Feria de Alhama, la Peña El Cocotazo. Cada año vive las fiestas de octubre desde el primer momento formando parte hasta de su pregón, donde sube al balcón del Ayuntamiento para dar la bienvenida a todos los alhameños a sus Fiestas Patronales.
¿Qué significa la Feria de Alhama para ti?
La feria representa una convivencia y unión con nuestros amigos y familia. Hay una conexión más estrecha entre las diferentes familias y amigos que componen nuestro pueblo. A familia y amigos me refiero a los diferentes grupos que se dan en la vida, peñas, asociaciones, colectivos de lo que sea. La suma de todos, hasta de quien va a su aire es la feria, es una cadena, cada uno aporta un granito y terminamos haciendo una playa, bueno sí, sin agua “salá”.
¿Qué labor representa la Peña del Cocotazo en las fiestas de octubre de Alhama?
Nuestra labor como peña es intentar hacer ese grano de arena del que te hablaba antes. A nivel de grupo aportamos actividades para la participación y el disfrute de grandes y pequeños. De acuerdo que dentro del conjunto pertenecemos a la parte más lúdica que a lo mejor puedan ser otras actividades con más fuerza cultural o religiosa pero creo que cada cosa en su momento y todo a la vez. Es algo raro pero no se puede explicar, hay que vivirlo.
La peña del Cocotazo es la más antigua de Alhama, ¿pensabas que ibais a vivir tantos buenos momentos?
Somos la peña más antigua que actualmente sigue participando, antes hubo unas cuantas que lo dejaron. Pues dudé una vez, pensé que se iba a terminar pero después ya no. A lo largo del tiempo hemos tenido altibajos como cualquier convivencia pero somos más positivos que negativos. Pensamos seguir saliendo aunque sea con andador.
¿Qué recuerdo has vivido más especial siendo parte de la Peña?
Muuuuuuuuchos, no puedo destacar ninguno, bueno sí, el carnaval del año 92, eso era el siglo XX, creo (se queda pensativa). Pues llegamos muy tarde, creo que una hora, nos habían sacado fuera del concurso por eso y el desfile duró un suspiro. Íbamos disfrazados de tren, estaba la locomotora y 4 vagones cada uno caracterizado con un motivo diferente. Fue brutal, terminé llorando porque se rompió el cartón de mi vagón y aunque ahora me rio, la experiencia valió la pena pero a lo bestia. Me decían: “¡pa que lloras si se va a quemar cuando terminemos!”, y venga tragos de agua con misterioso color naranja. Nuestro vagón era de hippies y ponía: haz el amor y no con el Guerra, por la época Alfonso Guerra estaba en activo. Lo recuerdo como si fuese hoy. Ese carnaval te lo terminaré de contar, ya verás…(ríe)
¿Qué criterios sigue la Peña para elegir al pregonero de cada año?
Los criterios son sencillos, que sea alhameño/a o que se sienta uno de nosotros aunque haya nacido fuera y que la trayectoria de la persona haya calado en el pueblo o que sean descubrimientos porque es cierto que hay muchos alhameños/as que están haciendo cosas pero que no son conocidos al ejercer su labor fuera del pueblo y no por ello han perdido su identidad. De todas formas ya sabéis que no sólo está la peña, hay una comisión que está compuesta para ese motivo, hay que abrir la mente sin perder nuestra esencia. No importa su estrato, lo genial es su experiencia y cómo conectan con su pueblo.
«No tenemos que meternos debajo de la cama, hay que tener respeto por lo que está pasando pero no por ello decaer»
Este año, que lamentablemente no hay Feria, ¿te gustaría decir algunas palabras a los alhameños?
Lo único que puedo decir es que no tenemos que meternos debajo de la cama, hay que tener respeto por lo que está pasando pero no por ello decaer. Esto pasará y volveremos a vivir todas nuestras fiestas populares repartidas a lo largo del año y con el doble de alegría. Y decir GRACIAS por lo bueno que vendrá.