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Descenas de feligreses caminan durante horas en peregrinación hasta Mula por el día del Divino Niño Jesús de Mula. Esta es la devoción que despierta el “Niño de Mula” en la Región de Murcia.

Esta tarde a las 19.30 h. la imagen del Niño saldrá en procesión por las calles de Mula, y mañana a las 8.30 h. partirá tras la eucaristía en romería hasta su santuario de El Balate.

La aparición de El Niño Jesús como base de las fiestas de El Niño de Mula

Las manifestaciones de esta festividad en la pedanía se desarrollan en el mes de septiembre, teniendo como principal atractivo las dos romerías con El Niño Jesús. Ambas conmemoran la milagrosa aparición acaecida el 21 de septiembre de 1648 y congregan a gentes de toda la comarca, que aprovechan esta jornada para pasar un día de convivencia en las inmediaciones del santuario.

La primera de las romerías tiene lugar el día ocho de septiembre y consiste en  ‘la bajada’ o traslado vespertino de la imagen hasta la ciudad de Mula, donde recibe cultos especiales ?novenarios y otras celebraciones- durante dos semanas. El pueblo acompaña a la imagen en su recorrido, al tiempo que se escucha el gran estruendo de tracas.

El trayecto entre la pedanía y la ciudad, de apenas 4 kilómetros, se cubre con gran lentitud debido a las continuas paradas y al elevado número de peregrinos. La imagen permanece durante tres días en el Monasterio de las Clarisas y el día 11 es trasladada en procesión a la Parroquia de Santo Domingo de Guzmán, donde es honrada con solemne novenario.

El día central es el 21 de septiembre, momento en que se celebra la procesión de regreso al Real Monasterio de la Encarnación de Mula.

Al día siguiente se realiza “la subida” de la imagen a su templo acompañada de una multitud ansiosa de portarla en andas y que arroja ramas de alhábega al trono. La Hermandad del Divino Niño Jesús de Mula vela para que la peregrinación transcurra sin incidentes.

Una vez guardado El Niño en el santuario, entre el sonido de las campanas al vuelo y el fragor de la pólvora, la gente se dispersa por los alrededores y comienza el capítulo culinario de la romería. Normalmente se guisan arroces, a lo que viene contribuyendo el Ayuntamiento de Mula desde hace unos años al ofrecer una paella gigante (para más de 1.000 personas), o se disfruta de las vituallas preparadas en los restaurantes cercanos.

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